Has llegado a tu casa,
y ahora, querrías saber para qué sirve estar sentado,
para qué sirve estar sentado
para qué sirve estar sentado igual que un náufrago
entre tus pobres cosas cotidianas
Sí, ahora quisiera yo saber
para que sirve el gabineta nómada y el hogar que jamás se
ha encendido,
y el Belén de Granada
-el Belén que fue niño cuando nosotros todavía nos
dormíamos
cantando-
y para que puede servir esta palabra: "ahora"
esta palabra misma: "ahora"
cuando empieza la nieve,
cuando nace al nieve,
cuando crece la nieve en una vida que quizás está siendo a
mía,
en una vida que no tiene memoria perdurable,
que no tiene mañana,
que no conoce apenas si era clavel, si es rosa,
si fue azucenamente hacia la tarde.
Sí, ahora
me gustaría saber para qué sirve este silencio que me rodea
este silencio que es como un luto de hombres solos,
este silencio que yo tengo,
este silencio
que cuando Dios lo quiere se nos cansa en el cuerpo,
se nos lleva,
se nos duerme a morir
porque todo es igual y tú lo sabes.
Introducción.
Presentación común para la lírica.
Podemos resumir el poema diciendo que en él se
nos presenta a una persona en el silencio de su casa que ya no encuentra
sentido a su vida.
Externamente el texto se compone de 26 versos
repartidos en dos estrofas, con un escalonamiento en medio al que me referiré
al tratar cuestiones fonológicas. Internamente podemos considerar cuatro
partes.
La primera estrofa se corresponde con dos. En primer
término una presentación del motivo del mismo, en su contexto: el individuo
sentado en su salita; después nos encontramos con una reflexión, un
cuestionamiento interno que se desarrolla a partir de una enumeración
de elementos y circunstancias que rodean al sujeto del poema. La segunda parte
se inicia en el verso 18 "Sí, ahora" y se centra en lo interior, el
silencio y el modo en que sel sujeto lo percibe, para conducir, a modo de
cierre, con el último verso que vuelve otra vez a presentar al sujeto del poema
desde fuera "tú lo sabes". Consideramos este desdoblamiento después
al tratar el nivel pragmático.
Análisis de la elocución.
Desde el punto de
vista métrico, el poema es una sucesión de líneas peéticas fluyentes con un
escalonamiento que acentúa el cambio en la estructuración interna, al que aludía
anteriormente. No hay encabalgamiento sirremático, salvo en el verso 6 al 7.
"Se ha encendido" El efecto rítmico se determina fundamentalmente por
la intensa recursividad producida por la repetición de palabras y estructuras.
"sí, ahora", "este silencio", "nieve",
"cuando nace, empieza, crece", "que no tiene, no conoce",
"se nos duerme"...etcétera.
También produce un efecto rítmico la combinación del
versículo largo y el corto o muy corto. Contrarresta, por ejemplo, el verso 17
y 18 unidos por encabalgamiento: "Sí, ahora/me gustaría saber para que
sirve este silencio que nos rodea". Como el pensamiento, el verso fluye
y se detiene sobre una idea clave, obsesiva.
En el plano sintáctico destacaremos la variedad
de tiempos verbales que se puede asociar con los cambios en la deixis, la
focalización y la relación emisor-destinatario del nivel pragmático: Quiero
decir que el poeta ha buscado, deliberadamente, producir cambios de prespectiva
que sitúen la imagen contemplada: la del anciano solo en su sala, esperando la
muerte, desde ángulos distintos. Uno sería el interno, para el cual se emplea
el subjuntivo: "Y ahora yo quisiera saber" y el condicional en una
perífrasis que expresa deseo: "me gustaría saber", así como el
presente en deixis absoluta (yo, aquí, ahora): "Yo tengo". Otra
perspectiva sería la externa, la voz poética se ve a sí misma desde afuera, el
proceso de externalización se produce mediante el uso de la segunda persona:
"Tú has llegado a casa", "Tú querrías saber", "Te
gustaría saber". Finalmente, una posición inclusiva que dota al texto de
un carácter más existencial y universalizador: "nosotros" (en
oposición a dios, como una fuerza ajena a nuestra voluntad), experimentamos el
declive. "se nos cansa el cuerpo", "se nos lleva", "se
nos duerme a morir".
Precisamente, esta perífrasis que acabo de citar,
construye una imagen hiperbólica de extraordinaria fuerza, lo que nos conduce a
considerar el plano semántico del poema. En este aspecto, una de las cuestiones
más relevantes es, a mi juicio, el uso de la pregunta indirecta, retórica. El
poeta se pregunta a sí mismo o a un posible oyente para qué sirven una serie de
cosas: estar sentado, el gabinete y el hogar apagado, (símbolo probable de una
familia inexistente ya, de la soledad); "la palabra ahora"(que
simboliza el vivir, la sucesión de hechos novedosos que constituyan una vida
que no tiene); "este silencio" (que se puede interpretar como la
ausencia misma de respuestas, la incapacidad de comunicarse, incluso la
invalidez de una comunicación con Dios, sustentada desde ese vacío
existencial). La respuesta está implícita en el final del poema: no sirven para
nada, "porque todo es igual y tú lo sabes". El autor o autora
del poema, busca desarrollar en el lector un proceso inferencial
(WILSON), Desde el punto de vista pragmático, este lenguje se apoya en símiles.
"sentado como un naufrago", adjetivaciones sorprendentes:
"gabinete nómada" e imágenes y metáfora como la ya citada y la
siguiente: "donde nace la nieve", para referirse a la vejez física o
interior, a la depresión profunda que conduce la privación de un sentido a la
vida. Por eso en la conclusión se dice: "porque todo es igual y tu lo sabes".
No podemos obviar las referencias a las flores, símbolo por excelencia de la
vida primavera como renacimiento de la vida. La nieve contrasta con este
renacimiento de las flores hasta el punto de qu tcictal el sujete a
"apenas conoce si era clavel, si es rosa”, “si fue azucenamente
hacia la tarde". Resulta especialmente llamativo el neologismo:
"azucenamente" síntoma de una creatividad moderna, en la que la
realidad se construye con toda la libertad que pueda sustentar la imaginación
poética.
INTERPRETACIÓN GLOBAL
En primer lugar, me gustaría destacar la presencia de temas
constantes en la lírica, la muerte en vida, la vejez como acabamiento lento y
sin sentido, la depresión como una forma de aniquilación del yo y del sentido
de la vida. Ambas significaciones serían aceptables, aunque a mi juicio, la
referencia a la nieve nos hace pensar más en la vejez, pero podría tratarse en
todo caso de un símbolo de un estado interior de envejecimiento con un
tratamiento moderno. Su cosmovisión (Goldman) es la de un individuo que ha
crecido en una sociedad fuertemente individualista, con acusado sentido crítico
que le conduce a un estado de angustia existencial cercana al nihilismo, más
allá de toda melancolía romántica (salvo la referencia al Belén y la
infancia) o de cualquier forma de consuelo religioso. La voz poética parece
interpelarnos ¿Para qué sirve mi dolor, mi soledad, mi angustia ante la muerte,
o mi resignación?. Intuimos que en ese estado de desolación vital, tampoco
encuentra ya sentido en el pasado, al que no se refiere en ningún momento como
posible fuente de valoración positiva. En medio de todo, la imposibilidad
incluso de reconocerse a sí mismo: "una vida que quizá está siendo la
mía" Hay un grito de rebeldía que sustenta la voz poética, frente al
silencio, el cansancio, la soledad y la muerte solo su voz, capaz de
sustentar el poema, da sentido a su existencia, incluso como negación del
mismo, ya que quien suscribe su inutilidad y fracaso, es también capaz,
paradógicamente, de escribir este poema. Y nosotros lo sabemos.
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